Porno

Escuchando a: Howard Shore - Stargher King (from the motion picture The Cell)

Mis no tan inocentes ojos han visto una enorme cantidad de porno... Creo que más del que debería haber visto. En mi humilde opinión, el porno ya no es como antes. Enterradas en el baul de la memoria quedaron aquellas revistas 'OUI' (las cuales era retocadas en la zona púbica para que de ninguna manera fuera a aparecer algo de pink en la foto); olvidadas quedaron aquellas revistas 'Picante' que un primo y yo comprábamos en una revistería fresa en Paseo de la Cima allá por el año de 1984. Estas últimas revistas no eran más que fotonovelas a blanco y negro impresas en papel revolución que cuando las veías te manchaban los dedos como delatando tu culpa. Luego fueron las revistas Hustler que comprábamos en Reforma; a diferencia de las primeras, estas mostraban sin ninguna inhibición los cuerpos de las mujeres. Creo que fue durante esta época en donde 'aprendí' que el pelo púbico se podía rasurar, que las boobies se podían agrandar y otras cochinadas más. Olvidadas quedaron esas películas porno en beta... películas en con de las mujeres no eran 'perfectas' y, que aunque sé que es difícil de creer (incluso para mí), tenían historia. El Mercado Juárez, en donde compraba las Hustler a finales de los 80's y principios de los 90's ya no existe como tal (ahora hay una Pulga en su lugar. Cero folklore). Las Playboy de lencería (que es de lo más fino que han visto mis ojos) no se consiguen en México... ni que decir de la Voluptuous, que no se vende en México porque las mujeres que presenta no son 'perfectas'.
Ahora uno va y renta algo de porn a su videoclub favorito -sí, en esta sociedad moralista que hace bajar un anuncio del Wonderbra por considerarlo indecente- (porque ahora ahí es donde se consiguen... antes tenías que ir a Reforma a cambiarlas y ser visto con los ojos inquisitivos de la demás gente que pasaba por ahí mientras hacías la transación), y la gran mayoría de lo que rentan es puro anal sex... no tengo nada en contra de eso pero, en dónde quedaron las películas con el old-fashioned-style?
Luego vino el internet a desvirtuar toda la industria. Ahora cualquier monita con webcam se siente porn-actress y se vende a los cinco continentes con las facilidades que la tecnología ofrece. Neta que ya no hay auténticas señoras de la actuación como Christy Canyon, Nina Hartley, Seka... hell! ya no hay ni actores como Ron Jeremy... gente común y corriente, 'imperfecta', que hizo del porno un arte.
Ahora todo es entre más cochino mejor... y eso que el porno en sí es cochino.


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